Gatos que residían en la antigua sede de la Parranda Marinera de Buches situada en al Calle Figueroa con Río del Oro. La puerta de la sede disponía de una gatera, lo que permitía la entrada y salida de los animales. Los gatos, a pesar de su relación afectiva, también los usaban como controladores de plaga. Los gatos estaban a cargo de Manuel Pérez.
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