Interior de la conocida pescadería de Lolita en Arrecife (al parecer el verdadero nombre era Pescadería La Graciosa). En el centro de la escena, una mujer (probablemente la propia Lolita) barre el suelo de baldosas a cuadros blancos y oscuros, característico de los locales comerciales de la época. Se aprecia también un mostrador con un báscula de pesaje y varios objetos marinos decorativos. En una época en la que la pesca era uno de los pilares de la economía. local, los pequeños comercios como este cumplían un papel esencial en la vida cotidiana de las familias lanzaroteñas.
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