El Puente de las Bolas y las naves de Rocar

Puente de las Bolas, uno de los monumentos más emblemáticos de Arrecife. Construido en el siglo XVIII para conectar la ciudad con el Castillo de San Gabriel, el puente está formado por dos arcos de piedra de cantería que se alzan sobre el agua, con una estructura levadiza en su parte central, sostenida por dos pilastras coronadas por bolas de piedra —de ahí su nombre. En el fondo, a la derecha, se aprecian las naves industriales de la fábrica Rocar situada en el Islote del Francés en funcionamiento en el momento de tomarse la fotografía. La imagen también muestra varios coches de época aparcados en la avenida junto al litoral, lo que da cuenta del tráfico ligero y la vida tranquila del Arrecife de entonces.

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