Todas las islas de Canarias se han visto afectadas por el fenómeno turístico, que se inicia en las islas centrales en la década de los sesenta, pasando a principios de los setenta a Lanzarote. En este contexto La Graciosa tampoco se sustrae a este proceso, desarrollándose en ella actualmente (década de 1990) un incipiente negocio turístico de tipo familiar. Documento digitalizado por Memoria Digital de Canarias (https://hdl.handle.net/20.500.12285/coloquios/776).