La imagen que Canarias transmite de sí misma, impulsada por las obras de arte o la publicidad, en la mayoría de los casos, no es más que un estereotipo. La vinculación que este territorio ha tenido con la mitología grecolatina y otras leyendas a lo largo de la historia, además de sus condiciones climáticas y geográicas, le ha hecho ganarse el sobrenombre de “Islas Afortunadas”; describiéndose constantemente su paisaje en términos de “paradisíaco”. El cine, como otras artes, ha colaborado enormemente a la difusión de dicho estereotipo, exaltando generalmente la imagen de la región. Sin embargo, existen un grupo de ilmes realizados en Canarias que pese a usar sus bellos paisajes, no responden a esa paradisíaca imagen. El cine fantástico ilmado en las islas, utiliza la naturaleza del archipiélago para crear otros mundos diferentes haciendo que este idílico lugar se convierta en un territorio hostil y peligroso.