El Buque Oceanógrafico Hespérides, uno de los laboratorios científicos flotantes más importantes del mundo atracó por primera vez en puerto lanzaroteño para continuar sus estudios en aguas canarias, enmarcados en el proyecto ZEE, Zona Económica Exclusiva, que dedica su actividad durante un mes al año bajo el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
En ese entonces el campo de fútbol aún no disponía del césped artificial. Tampoco aparece el trazo de la vía medular de Arrecife que discurre en la actualidad por la parte inferior de la imagen.
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